La sexualidad es amplia en posibilidades y por tanto muy diversa. No se refiere sólo al erotismo o a la actividad sexual propiamente dicha, sino que está definida también por conceptos como el de sexo, género, identidad sexual y de género y la orientación sexual. La sexualidad es, en definitiva, cómo vivimos individualmente el hecho de ser seres sexuados (nacemos con un sexo). Te explico aquí las diferencias entre estos conceptos para que puedas empezar a usarlos de manera correcta.
- SEXO: viene determinado biológicamente desde el momento de la concepción. Puede ser masculino o femenino según si la persona nace con genitales masculinos o femeninos, aunque existe también la intersexualidad, término que hace referencia a aquellas personas que nacen con características de los dos sexos.
- GÉNERO: es lo que socialmente se espera de cada uno de los sexos. Por ejemplo, las niñas visten de rosa y los niños de azul o las niñas llevan el pelo largo y lo niños lo llevan corto.
- IDENTIDAD DE GÉNERO: es cómo la persona se siente, independientemente de su sexo biológico. En función de esto, las personas podemos ser cisgénero (sentirse hombre teniendo características biológicas masculinas y sentirse mujer teniendo características biológicas femeninas) o transgénero (sentirse hombre teniendo características biológicas femeninas –hombre trans– y sentirse mujer teniendo características biológicas masculinas –mujer trans-). Pero esto no acaba aquí, porque también hay personas que se sienten parcialmente mujeres o parcialmente hombres (bigénero) y personas que no se identifican con un solo género (género fluido).
- ORIENTACIÓN SEXUAL: se define por el género por el que sentimos atracción sexual, afectiva y/o emocional, existiendo también la opción de no sentir atracción por ningún género concreto. La orientación sexual no depende de si te sientes hombre o mujer ni de tu sexo biológico. Puedes, por ejemplo tener pene, sentirte mujer y que te gusten las mujeres o tener vagina, sentirte hombre y que te gusten las mujeres. Hay infinidad de combinaciones y posibilidades. Estas son algunas de las orientaciones sexuales:
- Heterosexualidad: sentir atracción por personas del sexo y género contrario.
- Bisexualidad: sentir atracción por personas del mismo género y sexo o del género y sexo contrarios al propio. La intensidad de la atracción hacia unos u otros puede variar a lo largo de la vida y depende de muchos factores.
- Homosexualidad: sentir atracción por personas del mismo género y sexo.
- Pansexualidad: sentir atracción por las personas independientemente de su sexo y de su género.
- Demisexualidad: sentir atracción por personas con las que previamente ha existido un vínculo emocional.
- Sapiosexualidad: la atracción sexual tiene como factor determinante la inteligencia de la otra persona.
Esto es sólo parte de lo increíblemente diversa que es la sexualidad humana. En este post no están todas las posibilidades definidas. Existen casi tantas posibilidades como personas, porque cada uno/a vive su propia sexualidad de una manera distinta. La sociedad tiene el deber de aceptar esta diversidad en virtud de los derechos sexuales que todos/as tenemos. Recuerda: que tú no lo sientas o no lo conozcas no significa que no exista y, mucho menos, que no deba ser respetado.